Este piso está situado en el Poble Nou, tiene 140 m2 y un gran patio interior. Tiene un salón comedor central y alrededor se organizan las habitaciones con un baño en cada una de ellas. El cliente quería integrar la sala con la cocina, pero que fueran dos espacios independientes. Es por este motivo que el mueble que forma la isla central toma mucho protagonismo. Por un lado está revestido de madera natural donde incorporamos la pantalla, el sistema de sonido y una zona para sentarse y por la cara interior da soporte de trabajo a la cocina y tiene el mismo acabado que ésta.