Piso situado en el ensanche, tiene 65m2 muy bien aprovechados. El cliente nos transmite la importancia de hacer de la cocina un espacio abierto, pero al mismo tiempo que quede reservado, lo conseguimos con un separador de estructura metálica y vidrio que se aprovecha para poner un sobre de madera. A través del vidrio tenemos una visión completa de la cocina. En el baño se deja el lavabo visto en su recorrido hacia la habitación, e igual que la cocina, también pasa a ser un mueble decorativo dentro de la vivienda integrándose en la decoración armónica.